In-visible

Por fin, un corazón aliviado de tan profana palabra indigestante, un cerebro que no caduca, plazo eterno que no concluye al imitar libros que no nacieron en sus neuronas, un Shakespeare que rechaza tajantemente al amor, solo  porque de este no es su dueño, un Dalí que no sueña porque se lo exigen sus manos prostitutas, un hijo sin padre, un Freud que jamás leyó filosofía, un Tolkien que se perdió dentro de sí al construir su tierra media, un Shopenhauer que no conoció a las mujeres.

Esta frente a mí, jamás creí encontrarlo, aquel que no utiliza la mano para plasmar palabras, al contrario, las palabras vida tienen y el solo es la herramienta por la cual ellas hablan.

Por fin lo halle y sin embargo jamás entenderé, por que se ocultaba en la más densa oscuridad, ahora que la luz baño su cuerpo y ante mi mirar lo volvió visible me dice tres palabras:

–no se vivir–

Se desvanece, espero que en este mundo matizado de cordura, halle a otro ser como este, al que jamás conocí pero os juro,     si lo vi.

Arian A. R. Alegre

"Afgano invisible con aparición sobre la playa del rostro de García Lorca en forma de frutero con tres higos." Pintado en 1938.  Por Salvador Dalí.

“Solo vemos cuando existe una razón de ver”